Si te faltan ideas nuevas para tus reuniones de oración, no estás solo. Empieza por crear una reunión que guste para inspirar a tus feligreses a asistir. En este blog explicamos por qué la gente pierde interés en las reuniones de oración y qué cambios puedes hacer para fomentar una mayor participación. También incluiremos 10 ideas nuevas para que tus reuniones de oración sean más llamativas.
La oración es la herramienta más poderosa que tenemos para conectarnos con Dios. Muchos asumen que orar es una actividad solitaria, pero su poder crece si se comparte con la congregación. Las reuniones de oración pueden ser una oportunidad para compartir el mensaje de Dios y forjar relaciones sólidas con la iglesia y sus feligreses. Pero si la asistencia es baja, quizás necesites algunas ideas renovadas para mejorar la participación.
Históricamente, las reuniones de oración se han celebrado los miércoles o domingos por la noche. Estas reuniones pueden resultar poderosas para algunos, abrumadoras para otros y posiblemente tediosas para el resto. Con demasiada frecuencia, las iglesias pierden de vista su razón de ser. En este blog analizamos por qué la gente pierde interés en las reuniones de oración y qué cambios pueden implementar las iglesias para fomentarlas.
La mayoría de las reuniones de oración se celebran en la iglesia. A veces, en el auditorio principal, el vestíbulo, las aulas de la escuela dominical o el sótano. Es un lugar conveniente y confiable para una reunión semanal regular. Sin embargo, también es un poco aburrido. Asistir a la misma reunión en el mismo lugar siempre puede reducir las expectativas de lo que la gente encontrará en estas reuniones. Las congregaciones que salen de su zona de confort pueden celebrar reuniones de oración en las casas de los miembros. Estos lugares pueden añadir interés y más oportunidades para asistir a una reunión de oración. Invitar a la gente a casa requiere confianza. Visitar la casa de alguien automáticamente te abre los ojos a su estilo de vida y a su familia.
Consejo: Los grupos de oración que optan por reunirse al aire libre, en parques u otros lugares, fomentan la participación y las interacciones. Las reuniones de oración también pueden servir como una forma de defender los temas que apasionan a sus congregantes.
El aburrimiento no es la única razón por la que la gente deja de asistir a las reuniones de oración. Dado que la mayoría de las reuniones se celebran los miércoles o domingos por la noche, quienes trabajan al día siguiente probablemente no puedan asistir a las reuniones de oración presenciales. Los miembros de la iglesia que se encuentran en casa o no tienen con quien dejar a sus hijos pequeños podrían querer participar en la reunión de oración, pero no asistir físicamente. Después de la pandemia se han utilizado mucho más las reuniones virtuales evitando desplazamientos innecesarios o atascos en el tráfico. A medida que las congregaciones se han adaptado al mundo virtual, muchas también han optado por realizar reuniones de oración virtuales.
Los líderes de la iglesia también pueden usar estas reuniones para animar a los asistentes virtuales a ser más activos en la iglesia. Solo se necesita una computadora, laptop o teléfono inteligente y acceso a internet.
Las reuniones de oración en línea se pueden realizar por zoom, google meets o teams. Estas herramientas permiten invitar a cualquier persona a la reunión y requiere que se respete una hora de inicio y fin programada. Esto puede parecer incómodo, pero ayudará a evitar que las reuniones de oración se extiendan y desanimen a la gente a asistir.
Los niños pueden animar cualquier ambiente. Si la reunión de oración de una iglesia se está volviendo un poco monótona, quizá sea momento de aceptar nuevas perspectivas. Invitar a niños de cualquier edad a un grupo de oración implica que la reunión deberá reorganizarse para mantener su atención.
Involucrarlos en las actividades y la planificación puede dinamizar el grupo y aportar una nueva perspectiva. La incorporación de nuevos miembros implica nuevas ideas que pueden eliminar el aburrimiento y los miedos, y animar a más adultos a unirse a la reunión.
Las iglesias comparten constantemente sus preocupaciones sobre las generaciones más jóvenes, pero no suelen incluirlas en las oportunidades de liderazgo. Las reuniones de oración pueden ser una forma de enseñar a los adolescentes y niños a orar e integrar la oración en sus vidas. Al enseñar a los niños a involucrar a Cristo en su vida diaria, las iglesias están formando cristianos fuertes que difundirán el mensaje de Dios en sus comunidades.
Consejo: Ofrece a los voluntarios adolescentes la oportunidad de realizar mentorías. Esto ayudará a desarrollar nuevos líderes para la iglesia y a garantizar el éxito a largo plazo.
Las reuniones de oración poco originales se vuelven monótonas para los asistentes. Incluir un tema nuevo cada semana, genera entusiasmo y creatividad en una reunión de oración.
Los temas pueden incluir aspectos como el amor, la maternidad y la confianza, o diferentes tipos de oración. Desarrollar un tema para cada semana brinda a los líderes de las reuniones de oración ideas para desarrollar sus enseñanzas y actividades. Las reuniones de oración que incluyen un tema fomentan ideas nuevas y originales. Quienes asisten a estas reuniones pueden no sentirse tan estancados ni temerosos de encontrar ideas sobre por qué orar.
Consejo: Los temas también son una excelente manera de atraer nuevas personas a tu iglesia. Por ejemplo, con un tema de oración sobre la maternidad, puedes invitar a mujeres jóvenes y mayores a tu iglesia una vez al mes. No solo se abrirán a Dios, sino que también forjarán una relación duradera con la iglesia. De esta manera, continúa acercándote a diferentes grupos de edad, intereses y problemas dentro de la comunidad.
Orar es el motivo principal de una reunión de oración, pero las oraciones pueden extenderse si las reuniones se prolongan durante toda la noche. Algunas reuniones suelen extenderse más allá del horario establecido. Por ello, una opción es dividirse en grupos más pequeños de dos o tres personas al final de la noche. Los miembros pueden entonces tomarse un tiempo para orar en grupo unos por otros o por intenciones particulares.
Para muchas personas, orar se ha convertido en pedirle a Dios por una intención personal. Los asistentes le piden a Dios lo que desean en lugar de lo que necesitan, y se enojan y desaniman cuando sus oraciones no son respondidas. Puede ser desalentador cuando la gente no ve la obra de Dios. Las reuniones de oración suelen usarse para pedir ayuda a Dios, pero ¿qué pasaría si una vez al mes se convocara una reunión de oración para agradecer?
Las iglesias que están en contacto con sus feligreses deberían pedirles que llamen cuando necesiten ayuda y cuando Dios les haya traído bendiciones. ¿Alguien consiguió un nuevo trabajo? ¿Se curó la enfermedad de un niño? ¡Estos deberían ser momentos de alabanza! Muchas veces se pide, pero se olvida agradecer. La oración es la oportunidad de hablar directamente con Dios. Al compartir alegría y agradecimiento durante las reuniones de oración, los miembros de la iglesia sentirán el amor de Dios y revivirán su fé.
Consejo: Cuando organizas una reunión de oración para celebrar lo bueno y expresar gratitud, la monotonía de una reunión de oración típica desaparece al instante. Más personas se sienten atraídas por este enfoque positivo.
Orar no es fácil para todos, ni siquiera para quienes forman parte de un grupo de oración. Las iglesias tienen la responsabilidad de trabajar con sus miembros para formar predicadores de la palabra de Dios. Recuérdales que la oración es un momento para hablar con Dios con honestidad y franqueza. Al enseñar a orar , las iglesias ayudan a las personas a fortalecer su fé y relación con Dios.
Hay un par de cosas que los líderes de grupos de oración pueden hacer para capacitar a los miembros en la oración.
Dios no siempre responde a nuestra oración de la manera que esperamos. A veces, es difícil saber qué quiere de nosotros. Como miembros de su iglesia, las congregaciones deben tomarse el tiempo para escuchar su mensaje. Una excelente manera de recibir a Dios en la reunión de oración de la iglesia es pedirles a los miembros que mediten. Hablen con el grupo sobre la importancia de escuchar a Dios. Recordarles conversar sobre las maneras en que Dios habla a través de sus seguidores. Después de que los miembros mediten en grupo, pueden comentar cómo fue su conversación con Dios y cómo se sintieron.
Las iglesias pueden recopilar intenciones de oración de los miembros de la congregación. Al comienzo de cada reunión de oración, el líder del grupo puede distribuir la lista de intenciones para que los miembros del grupo oren por ellas.
Otra forma en que los líderes de las reuniones de oración pueden enseñar a orar es repartiendo intenciones de oración. Al repartir las listas, el líder puede asignar una o dos intenciones a cada miembro del grupo. Al dividirse en grupos más pequeños, estos miembros orarán por las intenciones asignadas y por la suya.
Las conversaciones con Dios no son solo para la boca y los oídos. Los cinco sentidos pueden usarse para celebrar los dones de Dios. Durante una reunión de oración, las iglesias pueden pedir a la gente que sostenga, huela y saboree mientras oran. Algunas ideas incluyen las siguientes:
Las reuniones de oración pueden durar más de una hora. Los miembros que asistan a estas reuniones agradecerán el detalle y la delicadeza. Los líderes deben procurar encontrar alimentos que se ajusten al tema semanal de la reunión de oración
Orar por alguien a quien se puede ver lo hace más personal. Los líderes pueden traer fotos de las personas o sitios visuales que se ajusten al tema semanal. Los miembros que tengan intenciones de oración pueden traer fotos personales y explicar quiénes son y por qué necesitan oración.
Esto puede ser difícil porque no queremos desanimar a nuestros miembros, pero que solo uno o dos acaparen la reunión puede limitar los efectos. Al comienzo de la reunión de oración, recuerden que todos pueden participar y que no es necesario orar mucho, sino hacerlo con fé. Pidan a todos que oren en una o dos frases si no se les ocurre nada más. Esto fomentará la participación de todos y, con suerte, ayudará a quienes se sienten cómodos orando a comprender que se trata de un grupo y que deben orar juntos.
Otra manera de lograr esto es limitar las intenciones personales a la última parte de la reunión. Los líderes pueden aprovechar la primera parte para enseñar a los miembros a orar y a hacerlo en grupo. Al final de la reunión, los miembros se dividirán en grupos para las oraciones individuales. En ese momento es relevante recordar a todos cuándo termina la reunión de oración para que no se extiendan demasiado.
Los miembros de la iglesia que asisten a las reuniones de oración probablemente se encuentren entre los más activos. Estas personas consideran su misión cuidar y orar por sus feligreses. Los líderes de la iglesia pueden animar a los miembros del grupo de oración a colaborar de diversas maneras, instruyéndolos sobre cómo apoyar económicamente a la iglesia.
Si las iglesias recolectan ofrendas y donaciones en línea, los miembros pueden ayudar a alcanzar objetivos de recaudación de fondos a través de campañas innovadoras como el crowdfunding, peer-to-peer, y mensajes de texto para donar.
Consejo: Pero antes de preguntar, informe a la gente sobre cómo donar y cómo sus donaciones pueden beneficiar a la iglesia. Si tienen un sitio web, creen un folleto para repartir a cada miembro de la reunión para que les sea más fácil conocer los enlaces importantes y las formas de donar
Donorbox ayuda a miles de iglesias de todo el mundo a marcar la diferencia en la comunidad y en la vida de las personas con su plataforma dedicada a la recaudación de fondos para iglesias, Donorbox MinistryMomentum. En este breve video de un minuto mostramos cómo aprovechar estas potentes funciones y facilitar las donaciones en línea a los feligreses.
Hablar en público es un miedo común. Mucha gente hará lo que sea para evitarlo, y la idea de unirse a un grupo donde se espera que lo hagan es impensable. La iglesia es un espacio seguro, y las reuniones de oración pueden ser una excelente oportunidad para formar y fortalecer relaciones. Los grupos de oración de apoyo pueden aumentar la confianza de las personas y animarlas a compartir y participar en más actividades de la iglesia. Desafortunadamente, algunas reuniones de oración están dominadas por una o dos personas, con poca participación. Quienes temen hablar en público llegan a creer que si no pueden orar con la misma intensidad y duración que otros, simplemente no orarán.
Aunque no tengan miedo de orar en público, la capacidad de atención de las personas es limitada. Las oraciones demasiado largas y las reuniones de oración que parecen repetidas una y otra vez desmotivan la participación. Los grupos de oración están llenos de personas amorosas y generosas. Están dispuestas a escuchar las dificultades de los demás y a unirse en oración sincera para ayudar. El problema surge cuando cada reunión semanal se convierte en un momento en el que las mismas personas comparten sus historias tristes. Siempre habrá miembros de tu iglesia que necesiten ayuda, pero es posible que estés ignorando a muchos por el bien de unos pocos.
Las reuniones de oración suelen celebrarse los miércoles o domingos por la noche. Puede que los miembros de tu iglesia estén agradecidos por la reunión de oración, pero que les resulte difícil asistir debido a responsabilidades familiares o laborales. Quienes asisten quizá hayan mencionado su problema con que las reuniones se extiendan más allá del horario habitual; muchos trabajan los lunes y jueves por la mañana. Quedarse hasta tarde la noche anterior o aprovechar el limitado tiempo familiar para asistir a la iglesia durante más de una hora puede ser un desafío.
Dios no siempre responde a las oraciones como esperamos. Esto puede ser comprensible, pero al enfrentarlo, muchos se desilusionan o incluso se enojan. Con demasiada frecuencia, las reuniones de oración se usan para pedirle a Dios lo que queremos o creemos necesitar. Hemos perdido de vista a Dios, y nuestras oraciones se parecen más a la lista de Navidad, olvidándonos con frecuencia de agradecer.
Las reuniones de oración pueden ser inspiradoras y emocionantes, pero también pueden resultar monótonas. Algunos grupos de oración son exclusivos, no por sus miembros, sino porque no hay nadie que los guíe, lo que dificulta integrarse en una comunidad ya formada. Se necesita liderazgo para dirigir al grupo e incorporar ideas diferentes que revitalicen las reuniones.
Irónico, ¿verdad? Las reuniones de oración pueden comenzar con la lectura de las Escrituras, canciones y networking. No hay nada de malo en ello, pero debido a estas actividades, las reuniones pueden terminar con solo unos minutos de oración antes de que la gente se vaya. Las mismas personas que asisten a las reuniones semanales rara vez oran entre semana. Sus vidas están llenas de miedo y estrés que esperan aliviar en estas reuniones de oración. A veces estos encuentros han perdido de vista el propósito de su formación. Los miembros de estos grupos desean una conexión más cercana con Dios, pero el grupo de oración no les ha ayudado a fortalecer esta relación
Las diez ideas para una reunión de oración que enumeramos para entusiasmar a la gente a asistir cada semana pueden ser utilizadas por iglesias de cualquier tamaño y religión. Mantener a Dios presente en las reuniones de oración es vital para su continuidad. Los líderes de la iglesia pueden destacar el mensaje de Dios y fortalecer la conexión entre los miembros mediante capacitación, listas de oración y actividades que fomenten la participación. Incluir a más personas en sus reuniones de oración también es esencial.
Al ofrecer reuniones de oración virtuales, salir de la iglesia y pedir a los miembros más jóvenes que se unan, las reuniones de oración pueden llegar a una audiencia más amplia.
Las iglesias han comenzado a comprender la importancia de las donaciones en línea para su supervivencia. Al fomentarlas, pueden encontrar maneras de involucrar a sus miembros y apoyar sus objetivos de recaudación de fondos.
Donorbox ofrece a las iglesias una opción asequible para procesar donaciones y ofrendas, así como gestionar donantes en línea. Si tu iglesia busca una manera de recaudar fondos en línea, visita nuestro sitio web. Consulta nuestro blog para más contenido.
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Rocío Piñeros